María Montessori nace a finales de agosto de 1870, en Chiaravelle, provincia de Ancona, Italia. Su familia es de clase media alta, lo que le permite asistir a la universidad. La profesión más recomendada para las mujeres a finales del siglo XIX era la de ama de casa, pero para las que no se conformaban solo con eso, se dejaba la puerta abierta hacia la enseñanza. Una mujer maestra estaba bien vista en aquella época. Sin embargo, estaba absolutamente vetado para el género femenino estudiar medicina, pero María Montessori se salta ese veto y se convierte en la primera mujer doctora en medicina en Italia. Estamos en el año 1896.
Las influencias de María Montessori
María tuvo la suerte de que aunque su padre era un militar muy rígido, aceptaba que las mujeres estudiasen y tuviesen otras inquietudes al margen del hogar y la vida familiar. Es así como al poco tiempo de terminar la carrera de medicina, comienza a colaborar en el área de psiquiatría. Y es en ese espacio, donde toma contacto por primera vez con niños que sufren determinadas deficiencias mentales, despertándose su interés de inmediato por esos infantes.
Montessori está influenciada especialmente por dos médicos franceses: Jean Itard y Eduardo Séguin. Jean Itard es un médico y pedagogo francés. Es el encargado de intentar rehabilitar a Víctor, más conocido como el niño salvaje de Aveyron. Más tarde se dedica en cuerpo y alma a la educación de niños ciegos y sordomudos, llegando a crear varios centros destinados a la educación especial.
Eduardo Séguin es un médico interesado igualmente en niños con dificultades mentales, y en sus problemas para aprender. En 1839 abre la primera escuela enfocada a la educación de esos pequeños.
María Montessori se siente fascinada por el pensamiento de estos dos médicos, y decide seguir por el mismo camino.
Escuelas Montessori
Montessori opinaba que el sistema educativo era excesivamente rígido e impositivo, y que no era adecuado para que los niños desarrollasen todo su potencial. Afirmaba que el niño debía recibir ayuda, pero sin perderle el respeto y reconociendo su valía, al mismo tiempo que admitía su derecho a opinar y a estar en desacuerdo.
También se opuso al tipo de aulas que habían: oscuras, tristes y cerradas. Ella defendía que el ambiente era muy importante para los niños, que tenían que estar en espacios amplios y luminosos, rodeados de arte, libros, plantas y música.
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| Escuela Montessori (Países Bajos) |
En el año 1926 crea la Real Escuela del Método Montessori, secundada por el dictador Benito Mussolini. Al poco tiempo se da cuenta de su error y renuncia a la ayuda del militar, lo que provoca el cierre de todas sus escuelas en Italia. Montessori se ve obligada a marcharse del país y viaja a España, a Barcelona concretamente. Pero la suerte sigue sin acompañarla y un año más tarde estalla la Guerra Civil, lo que la obliga de nuevo a emprender un nuevo rumbo, esta vez hacia Holanda.
En 1939 viaja a la India y la sorprende allí la Segunda Guerra Mundial, lo que la fuerza a quedarse en el país. Al finalizar la guerra vuelve a Holanda, y en los años siguientes funda varias escuelas que siguen su método. Recibe la condecoración de Doctora Honoris Causa de la Universidad de Ámsterdam, y es propuesta tres veces para el Premio Nobel de la Paz, en los años 1949, 1950 y 1951.
Libros de María Montessori
- Antropología pedagógica.
- La casa de los niños.
- Paz y educación.
- El secreto de la infancia.
Los niños y los adultos
Montessori pensaba que los niños poseen una capacidad inmensa para absorber conocimientos, una capacidad extraordinaria e ilimitada. El adulto tiene la misión de orientarles, de señalarles el camino. Pero un buen educador debe tener una excelente capacidad de observación, ocuparse de su crecimiento personal y no dejar nunca de aprender.
María Montessori fallece en Mayo de 1952, en Holanda.
Beatriz Moragues - Derechos Reservados
Muy interesante. No tenía ni idea que detrás del concepto Montessori se hallaba una mujer tan interesante :)
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario. Sí, sin duda fue una mujer que revolucionó el concepto de educación.
EliminarHola, Beatriz, hoy creo que necesitaríamos mil mujeres como ella para salvar la educación, mira que está mal el sistema y llega un nuevo gobierno con otra nueva ley y en vez de mejorar empeora y así sucesivamente...
ResponderEliminarElla fue un ejemplo a seguir.
Un abrazo. :)
Hola, Merche. Tienes toda la razón, que falta hacen mujeres así hoy en día. Cada nuevo gobierno, como tú dices, se dedica a quitar todo lo del anterior, incluso lo que podría ser positivo, y así estamos, muy mal.
EliminarAunque, no me preguntes el motivo, pero yo tengo la esperanza de que eso cambie en los próximos años, que de una vez por todas se dejen de poner parches y vayan a la raíz del problema, que es lo que nadie quiere hacer. En algún momento tiene que ocurrir... espero.
Muchas gracias. Un abrazo!!
¡Beatriz!
ResponderEliminarQué maravilla de recorrido has hecho por la vida y obra de María Montessori. Me ha encantado cómo lo cuentas, con ese respeto profundo que despiertan las personas que se adelantaron tanto a su tiempo. Y en su caso… ¡menuda adelantada!
Yo tengo amigos que llevaron a sus hijos a centros Montessori y siempre me ha fascinado ese enfoque tan sensato y, a la vez, tan revolucionario: poner al niño en el centro, fomentar su independencia, respetar sus ritmos… y hacerlo en un entorno limpio, bonito y conectado con la realidad y la naturaleza. Es que es casi sentido común bien hecho, pero con una base pedagógica ejemplar.
Me impresiona especialmente cómo los niños aprenden también a través del movimiento, de tareas reales y sensoriales que desarrollan su coordinación, su concentración y su autonomía desde la experiencia directa. Esa conexión entre manos, mente y libertad me parece una de las grandes claves del método.
Y me ha gustado mucho que no te hayas quedado solo en el método, sino que también nos hayas mostrado a la mujer que lo impulsó, con sus viajes, su exilio, sus renuncias… y esa mirada tan comprometida con los niños y con la paz.
Gracias por compartir esta historia tan valiosa. Ojalá más gente descubriera a Montessori no como nombre de escuela, sino como filosofía de vida y como educación integral para aplicar. Aunque no es fácil llevarlo acabo en el terreno educativo a nivel global, que también hay que decirlo.
¡Un abrazo!
Buenas noches, Miguel. Me alegro que te haya gustado el artículo, María Montessori es una de esas mujeres que siempre es un placer rescatar del olvido. Inteligente, valiente y con las cosas muy claras.
EliminarSupongo que a estas alturas resultará ya obvio que me gusta escribir sobre personas adelantadas a su tiempo, y es que creo que se necesita mucho valor para romper moldes y casi siempre se paga un alto precio.
Como tú dices, el método Montessori es puro sentido común. Lo que no lo parece es tener a niños sentados varias horas seguidas, la mayor parte del tiempo aburridos, y pretender que no se rebelen.
Muchas gracias. Un abrazo!!
Que buen artículo Beatriz, una mujer adelantada a su tiempo, no conocía su historia. Muy interesante.
ResponderEliminarUn abrazo 🤗
Muchas gracias, Dakota. Sin duda, una mujer adelanta a su tiempo. Este tipo de personas, casi siempre, son las que hacen que el mundo avance.
EliminarBuenas noches. Un abrazo!!
Sin lugar a duda este metodología así como la Waldorf son metodologías que en lugar de centrarse en el conocimiento memorizado buscan concentrase en los niños y buscar expandir todas su habilidad, algo que todo padre debe saber para buscar que sus hijos se desarrolle en toda su capacidad.
ResponderEliminarBuenos días. Muchas gracias por pasarte por aquí y dejar tu comentario. Estoy totalmente de acuerdo contigo, no se presta suficiente atención a lo importante que es el tipo de educación/enseñanza que se les proporciona a los niños. Nada que ver métodos como Montessori y Waldorf, con lo tradicional. Yo tengo la esperanza de que todo cambie a mejor en próximos años, aunque tengo claro que esos métodos es muy complicado que estén en la enseñanza pública. Saludos!!
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